El grunge fue mucho más que un género musical. Fue un movimiento de ruptura con lo establecido y de búsqueda de libertad. Una forma de mostrar su disconformidad con la sociedad de aquel momento. Un golpe encima de la mesa con el que la juventud de los 90 se hizo escuchar. Sin embargo, pese a tener una gran acogida del público de esa década, generó una serie de reacciones por parte de la industria musical. 

Según Billy Corgan, de Smashing Pumpkins, los ejecutivos de la industria estaban «resentidos» con los iconos alternativos de la época como Kurt Cobain o Eddie Vedder. ¿El motivo? Muy simple: la dificultad para «controlarlos». A diferencia de épocas anteriores, las bandas o los artistas surgidos en la década de los 90, por su gran diversidad, eran mucho menos sensibles a las directrices de la industria, haciendo su encaje más complicado.

Para Billy Corgan, esas figuras jugaron un papel fundamental en el desarrollo de la música actual. Así lo comentaba en una reciente entrevista con Allison Hagendorf (vía Ultimate Guitar), donde puso en valor que bandas como los propios The Smashing Pumpkins o Red Hot Chili Peppers consiguiesen sonar en la radio, algo impensable en épocas anteriores.

«Realmente fue un momento decisivo en el que… bandas como The Smashing Pumpkins, Pearl Jam, Nine Inch Nails, Peppers – y todo el mundo salía en la radio. Imagínate música alternativa… Ahora es casi impensable. Bueno, era igual de impensable entonces, en 1989 o lo que fuera».

El éxito estaba fuera de toda duda, pero el ir a contracorriente no favorecía en absoluto. Y es que, tal y como expresba Corgan, los poderes fácticos veían un problema en la incapacidad para «controlar» a esos actores clave.

«Cuando presentas un sistema periférico a un negocio que está todo envuelto, te sacan el dinero. Pero en el fondo están resentidos, porque no pueden controlarte, ¿verdad? No podían controlar a Kurt, no podían controlar a Eddie, no podían controlar a Layne y Jerry; simplemente no podían controlarnos. Y, en el fondo, odiaban eso. Así que no te das cuenta en ese momento, para ellos hay un tic tac del reloj, buscando reemplazarte«, explicaba el miembro de Smashing Pumpkins.

«Si te fijas en los artistas de los que estamos hablando… Billie Joe, Kurt, Trent, Courtney, todos son totalmente diferentes, y todos representamos algo del negocio de la música que, en el fondo, no querían realmente. Mira toda la historia del rock and roll en el negocio de la música. Realmente no quieren personalidades periféricas«, terminaba zanjando con rotundidad Corgan.