alejandro-sanz…-¿y-ahora-que?

Alejandro Sanz… ¿Y ahora qué?

Last Updated: 5 de septiembre de 2025By

Alejandro Sanz regresó a los escenarios mexicanos con la fuerza de alguien que ha convertido la oscuridad en luz. Este jueves, el Auditorio GNP de Puebla se iluminó con su voz y con las más de 8.000 personas que llenaron el recinto para acompañarlo en la segunda parada de su tour ¿Y ahora qué?, una gira de 24 conciertos que eligió México como punto de arranque.

El recorrido continuará por Mérida, Ciudad de México y varias ciudades más hasta concluir en Torreón, Coahuila, a finales de octubre. Sobre el escenario, Sanz armó un viaje que entrelaza lo nuevo con los clásicos que lo han acompañado durante más de 30 años de carrera.

La velada comenzó con la sutileza del piano y la entrada de “Desde cuándo”, preludio de una seguidilla de temas que desataron la euforia: “Capitán Tapón” y “La música no se toca” encendieron al público en los primeros minutos. Entre gritos de “¡Puebla!”, el madrileño mostró su cercanía y no tardó en rendir homenaje al país ondeando la bandera tricolor durante “Por bandera”, gesto que provocó un estallido de aplausos.

Uno de los momentos más esperados fue el estreno en vivo de “Bésame”, su reciente colaboración con Shakira, acompañado por sus coristas. También hubo espacio para la nostalgia: sentado en un sillón, bajo una lluvia proyectada en pantallas, interpretó baladas como “A la primera persona”, provocando un silencio reverente entre los asistentes.

Con su característico humor, advirtió: “Los ensayos están bien, pero los conciertos son mejores. Aquí venimos a dar música, no tonterías”, antes de entregar “Mi soledad y yo” y “El vino de tu boca”.

La emoción subió con “Quisiera ser” y el estreno de “Hoy no me siento bien”, su colaboración con Grupo Frontera, que puso a bailar a todo el auditorio. Más tarde, el ambiente se volvió íntimo con “Regálame la silla donde te esperé”, preparando el terreno para el estallido colectivo que llegó con “Amiga mía”, coreada por todos a una sola voz.

El ritmo no decayó: “Todo aquello que me diste” y “No es lo mismo” alternaron la intensidad con la complicidad del público. Antes de retirarse, Sanz recordó: “Terminamos la gira pasada en Puebla y ahora empezamos aquí. ¿Casualidad? Yo no lo creo”.

El “encore” trajo consigo versiones acústicas de “Y, ¿Si fuera ella?” y “¿Lo ves?”, pero la verdadera explosión se produjo con “Corazón partío”, tema insignia que superó la nostalgia para convertirse en una fiesta colectiva. Un remix inesperado hizo vibrar al auditorio, cerrando con energía el concierto.

Finalmente, Sanz recorrió distintos capítulos de su trayectoria con joyas como “Cuando nadie me ve”, “El alma al aire”, “Mi marciana” y “Yo te traigo… 20 años”. Con ellas, reafirmó no solo su vigencia artística, sino también el lazo profundo que mantiene con México, un país que sigue respondiendo con la misma pasión desde aquel debut en 1991 hasta hoy.

#FormulaMail

No te pierdas nada y recibe todas las noticias en tu correo electrónico