Un cuarto de siglo después, un homenaje que sigue latiendo
Los Secretos celebran los 25 años de ‘A tu lado’, el disco colectivo que mantuvo vivo el legado emocional de Enrique Urquijo y unió a grandes nombres de la música española.
Este 16 de noviembre se cumplen 25 años de A tu lado, el álbum que reunió a buena parte de la escena española para rendir homenaje a Enrique Urquijo, fallecido en 1999. El proyecto nació casi como un reflejo emocional: músicos, amigos y compañeros necesitaban una forma de sostener ese hilo frágil —pero resistente— que habían tejido dos décadas de canciones.
La ausencia de Enrique dejó una herida inmensa en la música nacional. Desde los años ochenta, con su voz melancólica y su forma íntima de narrar lo cotidiano, había logrado algo difícil: escribir canciones que parecían cartas personales para cada oyente. Su talento estaba en la precisión emocional, en ese detalle mínimo capaz de quedarse a vivir dentro de quien lo escuchaba.
Tras su muerte, Los Secretos se encontraron en un terreno incierto. ¿Seguir? ¿Frenar? ¿Buscar una nueva dirección? La respuesta acabó convirtiéndose en un álbum coral. A tu lado se grabó entre 1999 y 2000 con una naturalidad sorprendente. Luz Casal, Antonio Vega, Manolo Tena, Joaquín Sabina, Pau Donés o Miguel Ríos —entre muchos otros— se sumaron al proyecto movidos por una razón común: todos tenían una historia marcada por una canción de Enrique.
El resultado fue un disco que funciona como mosaico de miradas y emociones. No busca reinventar, sino respetar el pulso original de cada tema. Cada artista se acerca al repertorio con un cuidado casi ritual, consciente de que estaba tocando algo aún caliente. Álvaro Urquijo guió el proyecto con la delicadeza de quien protege un cuaderno lleno de recuerdos imprescindibles.
En un momento de transformación para la industria española, A tu lado se convirtió en una fotografía generacional. Confirmó hasta qué punto Enrique había influido a músicos muy distintos entre sí y cómo su forma directa, minuciosa y sin artificios para contar la vida había dejado huella en todos ellos.
El público respondió con un cariño arrollador. El disco alcanzó el disco de platino y se convirtió en uno de los álbumes homenaje más recordados de los 2000. Más que las cifras, lo valioso fue que permitió que muchos descubrieran la obra de Enrique desde otras voces y que su catálogo siguiera vivo incluso para quienes no crecieron con Los Secretos.
Su repertorio —temas como “Agárrate a mí, María”, “Ojos de gata”, “La calle del olvido” o “Pero a tu lado”— continúa conservando ese temblor íntimo que definió su estilo. Enrique escribía en luz tenue, con un sentido poético único y una capacidad feroz para entender lo que duele y lo que salva.
Los Secretos siguieron adelante, sí, pero siempre con la presencia de Enrique flotando en cada nueva etapa. Más que un reemplazo o una reinvención, encontraron una manera de seguir caminando sin soltar su memoria.
Hoy, ‘A tu lado’ permanece como un documento emocional y una puerta abierta al legado de un compositor que convirtió lo cotidiano en algo perdurable. Su música no vive de la nostalgia: vive de la verdad, y esa verdad no envejece.
Redacción (Agencias).
#FormulaMail
No te pierdas nada y recibe todas las noticias en tu correo electrónico


