El último concierto de Black Sabbath, celebrado el sábado 5 de julio en Villa Park, Birmingham, no solo supuso la despedida definitiva de los pioneros del heavy metal, sino también el primer encuentro entre dos leyendas del género: Ozzy Osbourne y Axl Rose.

La velada reunió por primera vez desde 2005 a los miembros fundadores de la banda —Osbourne, Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward— acompañados por un cartel estelar en el que participaron nombres como Metallica, Slayer, Pantera, Guns N’ Roses, KoRn, Tool, Alice In Chains, Anthrax, Steven Tyler y otros referentes del rock. El evento estuvo dirigido musicalmente por Tom Morello, guitarrista de Rage Against The Machine, y presentado por el actor Jason Momoa, quien incluso protagonizó un moshpit durante la actuación de Pantera.

En ese contexto se produjo el esperado encuentro entre Ozzy Osbourne y Axl Rose, líder de Guns N’ Roses. Ozzy compartió una foto junto a Rose tras bastidores y lo describió como una “leyenda” y “un completo caballero”. Más tarde, publicó otra imagen junto a Axl y Slash, destacando lo especial del momento.

Por su parte, Axl Rose también expresó su emoción a través de una publicación en redes sociales, donde calificó el evento como “increíble” y “emotivo”. “¡CONOCÍ A OZZY! ¡Qué locura! Nunca antes nos habíamos visto. Fue genial conocer a Sabbath”, escribió, subrayando además el impacto de ver a Osbourne sobre el escenario pese a sus problemas de salud.

Axl reconoció lo duro que debió ser para Ozzy enfrentarse a ese desafío físico, ya que el cantante británico —que no daba un concierto completo desde 2018— ha sido sometido a varias cirugías y padece la enfermedad de Parkinson, lo que lo obligó a actuar sentado durante el show. “Lo hizo. Todos lo apoyamos y lo respetamos enormemente”, añadió.

Durante el concierto, Guns N’ Roses homenajeó a Black Sabbath con versiones de varios temas como It’s Alright, Never Say Die, Junior’s Eyes y Sabbath Bloody Sabbath, además de tocar sus clásicos Welcome to the Jungle y Paradise City.

La noche estuvo cargada de momentos únicos, como el duelo de baterías entre Danny Carey (Tool), Travis Barker (Blink-182) y Chad Smith (Red Hot Chili Peppers), quienes interpretaron Symptom Of The Universe. También se vivieron colaboraciones especiales con Rudy Sarzo, Nuno Bettencourt, Steven Tyler, Ronnie Wood y Yungblud, quien lideró una versión de Changes dedicada al fallecido futbolista Diogo Jota.

Redacción

Fotografía · Ross Halfin