El guitarrista de Black Sabbath, Tony Iommi, ha alabado a Metallica y al motiviento del thrash metal por hacer evolucionar el heavy metal, género del que muchos le consideran padre. 

Charlando con Guitar World (vía Ultimate Guitar), Iommi ha hablado sobre su influencia en todas aquellas bandas que le dieron un giro aún más duro al sonido del metal: «Fue bonito escuchar a esas bandas de thrash rindiéndonos tributo. Es genial cómo fueron capaces de impulsarlo hacia algo nuevo y convertirlo en algo propio. A mí sólo se me ocurrían cosas que me gustaban».

«Así que fue genial oír que a otros músicos les gustaba lo que yo había hecho, que tomaban el mismo tipo de idea y la mejoraban, evolucionándola hacia su propio sonido. Como Metallica, por ejemplo, que probablemente aprendieron cosas de nosotros y de otra gente».

«Lo que hicieron con el sonido metal, convirtiéndolo en thrash, fue fantástico. Siempre han sido respetuosos con nosotros y son unos tipos encantadores. Me encanta su actitud hacia las cosas, su forma de escribir y todo eso. Nos recuerda mucho a cómo éramos nosotros: todos en una habitación ensayando juntos y tomándoselo en serio«.

No todo el metal le gusta a Iommi

Por otro lado, no toda la música relacionada con el metal le gusta a Iommi. El hacha alaba a los intérpretes más rápidos y técnicos, aunque admite que él no enfoca la música de esa manera: «Los jugadores técnicos de hoy en día son brillantes. Incluso los chavales más jóvenes hacen cosas increíbles en sus habitaciones. Pero yo siempre vuelvo a las raíces del blues, busco en lo más profundo de mí mismo y digo la verdad. No pienso en lo que puede impresionar a la gente o romper los límites de velocidad. Lo único que me importa es cómo me suena a mí».

«Algunas de las guitarras que escucho hoy en día son demasiado técnicas. Tienes que ser preciso en esta o aquella nota. Yo no puedo hacer eso: si hago un solo en un disco, nunca es lo mismo en directo. No puedo reproducir lo que hice en el estudio. Haré algo parecido pero no exacto».