Calbe Quaye, conocido por su trabajo como guitarrista de Elton John, ha recordado cómo acabó ocupando el puesto de Jimmy Page cuando el de Led Zeppelin aún era músico de sesión y lo dejó para unirse a The Yardbirds. 

En aquel momento, aunque los músicos de sesión tenían la misma tarea que los de hoy, las grabaciones eran en cinta, lo cual aumentaba la presión para los artistas, sobre todo para los que trabajaban con un calendario en mente.

Ahora, en una entrevista con Guitar World (vía Ultimate Guitar), el hacha ha recordado cómo Page decidió dejar su trabajo como músico de sesión: «Un amigo mío, Billy Nicholls, fichó por el sello Immediate de Andrew Oldham. Billy venía con maquetas y yo les hacía de ingeniero. Cuando Billy grabó su primer álbum en Olympic Studios, quiso que yo tocara en él porque le había ayudado con sus maquetas”.

«Por aquel entonces, todo eran músicos sindicados. Había un contratista en el estudio, David Katz, y su hermano, Charlie. Charlie se encargaba de las cuerdas y David de la sección rítmica».

El caso es que Caleb era joven, pero no le faltaba experiencia a las seis cuerdas, lo cual provocó que se le ofreciera el trabajo que iba a acometer, en principio, el mismísimo Jimmy Page.

«Yo estaba allí en una cita de la sección rítmica; tendría unos 16 años. Cuando terminamos, David me dijo: ‘Caleb, me gusta lo que haces. Tengo todo este trabajo preparado para Jimmy Page, pero él ya no quiere hacerlo’. Jimmy era un tipo de estudio de primera, pero había tenido un ataque de nervios, se hartó y se unió a los Yardbirds«.

Por supuesto, esa era la clase de oferta laboral que uno no puede rechazar: «David me dijo: ‘¿Te gustaría hacerlo?’ Le dije: ‘Sí, señor, me encantaría’. Me dijo: ‘Primero, necesito que te afilies al Sindicato de Músicos’. Corrí calle abajo hasta la oficina del MU y firmé. Todo el trabajo que había para Jimmy Page fue para mí».

Eso sí, pese la reputación de Page (que ni siquiera había fundado aún Led Zeppelin), a Caleb no se le indicó, en ningún momento, que tuviera que sonar como él: «Tenía libertad para hacerlo como quisiera. Nadie me dijo nunca: ‘Necesitamos que toques como Jimmy’. Como en la mayoría de las sesiones, si había algo específico en el arreglo, yo lo tocaba. Pero fuera de eso, era libre de hacerlo como quisiera».