El guitarrista de los colosos del metal brasileño Sepultura, Andreas Kisser, ha invitado a todos los antiguos miembros de la banda para ser parte de su último show, incluyendo a los hermanos Max e Iggor Cavalera. 

En una nueva entrevista con Moshpit Passion (vía Louder Sound), el guitarrista, que se unió a la banda en 1987, ha afirmado que espera que la banda pueda ofrecer su concierto de despedida en 2026 en São Paulo, Barsil. Posteriormente, Kisser también ha asegurado que todos los excomponentes de la banda serán invitados a formar parte de esta celebración.

«Nos gusta invitar a todos los ex miembros, incluidos los hermanos Cavalera«, dice Kisser. «A ver qué pasa. Estamos trabajando para eso, para tener una gran celebración para los aficionados.»

¿Un regreso imposible?

Max dejó Sepultura en 1996, después de una fuerte discusión con el management de la banda. Iggor seguiría su camino 10 años después. Posteriormente, los hermanos se reagruparían con un proyecto propio: Cavalera Conspiracy.

Kisser ha admitido, ahora, que la situación con los hermanos Cavalera no era buena: «No nos importa quién tiene razón o no. Nunca llegaremos a ese punto«. El guitarrista reconoce que Sepultura y los Cavalera «tienen diferentes puntos de vista y diferentes perspectivas sobre los mismos acontecimientos históricos«. Esto, sin embargo, no apaga la esperanza del guitarrista de que los hermanos puedan olvidar sus diferencias con la banda por una noche, de forma que todos puedan celebrar la trayectoria de los titanes brasileños una última vez.

«Así que toquemos, pasémoslo bien por los fans, por nosotros, por nosotros mismos«, implora el guitarrista, «y cerremos realmente estos increíbles 43 años o 44, lo que sea que vaya a ser en ese momento, en paz con nosotros mismos, y busquemos algo realmente diferente después».

Eso sí, Max ya dijo, hace poco, a Metal Injection, que no tenía ningún interés en volver a Sepultura: «Cuanto más pasa el tiempo, más siento que no lo necesito«.

Sepultura anunció su gira de despedida el pasado mes de diciembre. En otra charla con Metal Hammer, Kisser explicaba las razones que tenía el grupo para cerrar su recorrido por los escenarios: «El último álbum, ‘Quadra’, es un disco increíble y ¿por qué esperar a que ocurra algo fuera de nuestro control para acabar con la banda?».

«Mi experiencia personal con la muerte de mi mujer de cáncer hace dos años también me ha dado un sentido diferente a la vida. Todos los días cerramos ciclos en nuestra vida y es un privilegio hacerlo conscientemente. Estando en una banda sientes muchas presiones, y a veces no tiene sentido artísticamente hablando. No queremos ser esclavos de nuestros avatares”.